El maltrato contra las mujeres es un acto que en Colombia está rechazado por la Constitución y genera problemas legales. Pese a las políticas públicas y acciones que se han implementado para la disminución de las cifras de maltrato, en Colombia las mujeres continúan siendo vulneradas.
La Constitución Política colombiana no diferencia ni separa los derechos por género, para el Estado debe haber total igualdad sin importar la raza, religión o sexo. Sin embargo y pese a que en la constitución se estipula la igualdad laboral y la no discriminación a las mujeres, ¿porque las cifras de agresión a las mujeres no disminuyen? el diario El Tiempo publicó un dictamen de la Fiscalía, en donde mostraban que a diario 44 mujeres son agredidas físicamente.
Según la psicóloga Sandra Bermúdez Castro, la agresión física y mental contra las mujeres viene de un estado patriarcal el cual se vive en Colombia. El patriarcado se puede explicar cómo la distribución desigual de poderes entre los géneros. En el papel ese estado patriarcal no debería existir, ya que en la Constitución se estipula en los artículos 13, 43 y 53 que se garantiza la contratación de un número mínimo de mujeres en ciertos cargos públicos como las alta cortes, congreso o en altos cargos del gobierno nacional y rechazando todo tipo de discriminación y violencia de género. Colombia hace parte de la “Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer”, la cual declara los derechos de la mujer estipulados en un instrumento internacional creado por la ONU y adoptado por más de 100 países. Fernando Cañón, es asesor legal de la embajada de Estados Unidos y explica que el desconocimiento de las normas son los encargados de encasillar la sociedad como patriarcal, “existe un marco normativo muy complejo que se ha desarrollado a lo largo de los años, pero la ignorancia de las normas impiden que estos instrumentos realmente funcionen con el fin para el que fueron creados”
Luz Dary Pedraza Barreto es la referente local de la Casa de Igualdad de Oportunidades para las mujeres de Usaquén. Ella explica que el gran desafío que se tiene con las mujeres independientemente de su maltrato es comenzar a darles “identidad de ciudadanas” lejos del rótulo de madre. “históricamente tenemos derechos, pero en la práctica no es así, se han avanzados marcos normativos para reconocer a las mujeres como ciudadanas, pero esa campañas no tienen un gran impacto, entonces desde acá generamos estrategias para que se reconozcan como ciudadanas y que conozcan sus derechos y como hacer respetarlos”
Las Casas de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres son lugares puestos por la alcaldía de Bogotá desde el 2010, la ciudad cuenta con 17 de ella en diversas localidades. Estos espacios se abren en lugares considerados de alto impacto para las mujeres. Luz Dary Pedraza explica que los casos varían dependiendo las localidades, Las Casas de Igualdad de Ciudad Bolívar o Mártires son las que reciben más agresiones sexuales o de género por raza. La situación compleja de estos lugares y por los problemas sociales son los que hacen que los casos sean repetitivos justamente en estos espacios.
Sea cual sea los casos, las personas que trabajan para ésta política pública ciudadana brindan una ayuda psicológica y anímica, para después darles a esas mujeres el apoyo y la instrucción legal a la cual deberán someter su situación.
Sandra Bermúdez, explica que todos los procesos son diferentes y que no se puede establecer un tiempo y recuperación psicológico y que lo primero es restablecer las redes sociales de ellas mismas. Lo más preocupante de los casos de agresión, son que las mujeres rompen sus redes sociales, por prohibición de su pareja o por rechazo de los demás por su caso de agresión, las mujeres no tienen vínculos sociales con las personas que solían ser sus amigos o su familia.
Aunque la Constitución, las leyes y los programas de apoyo sean garantes para evitar maltratos, nadie puede decidir por las mujeres que deben hacer con sus parejas. No se puede controlar los sentimientos de las personas, por lo tanto el problema es algo que la sociedad debe abarcar desde los agresores, desde las personas que hacen daño, para así tratar de ponerle punto a una historia que se ha repetido en Colombia desde el comienzo de su historia. El 2013 ha sido un años de avances en contra del maltrato de la mujer. Comenzando este año se creó la Secretaría de la Mujer, con el reto de responder por los derechos de las mujeres, los cuales, paradójicamente unos meses atrás se vieron vulnerados y violados en el caso más estremecedor que recuerde la sociedad colombiana como lo fue el Caso de Rosa Elvira Celi.
La secretaría está, las campañas están, las políticas públicas existe, es hora que en la ciudad se empiecen a tomar medidas para los agresores y así evitar que los números y los casos dejen de subir.
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